on la realitat supera la ficció
viernes, 20 de julio de 2012
viernes, 20 de abril de 2012
martes, 10 de abril de 2012
miércoles, 21 de marzo de 2012
...el espiritu del hombre que sueña queda plenamente satisfecho con lo que sueña. la angustiante incognita de la posibilidad deja de formularse. mata, vuela mas deprisa, ama cuanto quieras. y si mueres, ¿acaso no tienes la certeza de despertar entre los muertos? dejate llevar, los acontecimientos no toleran que los difieras. careces de nombre. todo es de una facilidad preciosa.
me pregunto que razon, razon muy superior a la otra, confiere al sueño este aire de naturalidad, y me induce a acoger a la otra, confiere al sueño este aire de naturalidad, y me induce a acoger sin reservas en el momento en que escribo. sin embargo, he de creer el testimonio de vista, de mis oidos; aquel dia tan hermoso existio, y auqel animal hablo.
la dureza del despertar del hombre, lo subito de la ruptura del encanto se debe a que se le ha incluido a formarse una debil idea de lo que es la expiacion.
en el instante en que el sueño sea objeto de un examen metodico o en que, por medios aun desconocidos, lleguemos a tener conciencia del sueño en toda su integridad (y esto implica una disciplina de la memoria que tan solo se puede lograr en el curso de varias generaciones, en la que comenzaria por registrar ante todos los hechos mas destacados), o en que su curva se desarrolle con una regularidad y amplitud hasta el momento desconocidas, cabra esperar que los misterios que dejen de serlo nos ofrezcan la vision de un gran misterio. creo en la futura armonizacion de estos dos estados, aparentemente tan contradictorios, que son el sueño y la realidad, en una especie de realidad absoluta, en una sobrerrealidad o surrealidad, si asi se la puede llamar. esta es la conquista que pretendo, en la certeza de jamas conseguirla, pero demasiado olvidadizo de la perspectiva de la muerte para privarme de anticipar un poco los goces de tal posesion.
se cuenta que todos los dias, en el momento de disponerse a dormir, saint-pol_roux hacia colocar en la puerta de su mansion de camaret un cartel en el que se leia: el poeta trabaja.